Vivir el arte
El arte no sólo se ve como un trabajo, es una forma de vida, es algo a lo que se debe dedicación y amor. El artista no es un ser aislado, posee una alta sensibilidad sobre lo que le rodea e intenta llevar a los demás ese sentimiento a través de su creación. Fícaro ha llevado su arte al público guayanés desde hace más de dos décadas. Fícaro estuvo desde muy joven interesado por el arte. Nació en Carúpano, estado Sucre, y pasó parte de su infancia en Puerto La Cruz. Tiene más de 35 años en Puerto Ordaz donde desde la década de los ochenta se ha desempeñado como artista. Su nombre artístico se deriva de la unión de Fidel Castro Rodríguez, su nombre completo.
“Color, forma y textura” son los elementos de su trabajo ha evolucionado a medida que madura como artista, para él la primera de sus etapas sucedió hacia 1996, fecha en que realizó su primera exposición individual llamada Atmósfera Oscura.
Evolución y trayectoria
Antes de Atmósfera Oscura realizó trabajos experimentales, pero comienza a hablar de su propio estilo en esta exposición. “Atmósfera Oscura fue inspirada en la poesía que puede brindar la noche”. Ya habían indicios de la dirección de esta etapa a finales de la década de los ochenta cuando una de sus obras es premiada en la Sala de Arte Sidor (Homenaje a Walt Witman, 1988).
En el año 2002 realiza su segunda exposición individual, Energía Vital; la cual se compone de 7 piezas de mediano formato (95x130 cm) que muestran imágenes de la naturaleza y su belleza. Su obra “Guardianes del Auyantepuy” forma un paseo por el paisaje de la Gran Sabana.
Lleva a grandes dimensiones formas de flores en sus obras “Castaño rojo”, “Rosa de la montaña” y “Flores de Cactus”, y enseña un ángulo distinto del árbol de Araguaney.
Acerca de su tecnica, Fícaro explica que “todas las obras son texturizadas en arena con pasta profesional sobre telas pintadas al óleo, el trabajo de pintura se siente en expansión y vibración porque toda la obra es a base de gotas y trazos gestuales”.
Un tercer momento de gran importancia para Fícaro fue su Obra Mística, la cual no realizó para exposición, sino con un carácter más personal. “Es compleja en realización porque las telas sobresaltan por el relieve de las pastas con el yute, una tela para sacos”.
“La serie mística se realiza como un desahogo y una liberación que expresa todo mi crecimiento espiritual”. Algunas de las piezas que forman parte de esta serie son “Cristo Crucificado, en estilo expresionista con atmósferas sepias; Ríos de Agua viva, donde se mezcla el paisaje y se trabaja el tema de la energía creadora sexual; y Ego y corazón, que plantea el dilema de la personalidad como elemento perturbador del espíritu”.
En el año 2006 realiza la serie “Exhuberancia Abstracta”, donde “las formas sólo son sugerencias y más importan las atmósferas, la sublimidad del color y su relación con la palabra. La semiótica del trabajo es un lenguaje entre lo escrito y lo visual para acercarme al espectador”.
Actualmente Fícaro ha intentado expresarse a través de la fotografía, recogiendo mediante este medio lecturas de sus experiencias anteriores, y trabajos nuevos como el que recientemente realizó en la Gran Sabana.
La belleza de la naturaleza
Fícaro participa en el Salón Invitacional La Magia del Sur, ubicado en Santa Elena de Uairén y auspiciado por la Aldea Universitaria de la UNEG. Esta exposición permanecerá hasta el 7 de febrero y representa un encuentro de diferentes artistas, entre ellos Pablo Altar, Santiago Kurei “el caminante”, Hugo Castillo, Luis Vignati, César Marín y Miguel Helbonniere.
La exposición posee 36 piezas y ha sido producto del esfuerzo de un destacado grupo, Fícaro aprovechó para agradecer a Karen Castillo y todo su equipo de trabajo por haber logrado llevarla a cabo.
Para este artista la naturaleza es fuente de gran inspiración, y Ciudad Guayana “tiene características especiales; es una ciudad enclavada en una exhuberancia muy especial. Siempre se ve cielo, piedras, agua y vegetación en cualquier parte; la naturaleza está a flor de piel y hay mucho de donde inspirarse”.
Otra belleza natural que no deja de maravillarle es la Gran Sabana ; “ahora que volví a ir aún me sorprende”.
“Un amigo sincero y leal”
El pintor y artista popular Luis Vignati es amigo de Fícaro desde que se conocieron en 1988. Ambos trabajaron juntos en talleres y exposiciones. Vignati comentó que “el trabajo de Fícaro ha tenido un proceso evolutivo, le ha costado madurar. Hoy él, como artista estudioso ha tenido un gran avance”.
Además de reconocer el talento de Fícaro como artista, Vignati conoce su amistad y lo considera un gran amigo. “Es sincero, leal y no tiene cartas ocultas. Es uno de los mejores pintores y amigos que tengo en Guayana. Ha avanzado y por eso me siento orgulloso y alegre; pienso que el artista debe ser sincero con sus colegas, se deben ayudar, y aunque somos muy diferentes siempre nos ayudamos”.
¿Qué es lo que quiere como artista?
“Quiero la difusión, sensibilizar al ser humano, eso se logra cuando uno en el arte sabe que su trabajo tiene difusión. Quiero que se masifique el arte y llegue a todos los sectores de la sociedad”.
¿A quién admira?
“A Dios, por toda la creación. Cuando uno ve la Gran Sabana y la misma Ciudad Guayana con todos sus parques impresiona. En cuanto al trabajo creativo en sí, empieza una admiración por Francisco Hung, a toda la poética visual de Roberto Mata y a toda la sublimidad de Vásquez Brito; sin dejar de admirar a todos los autores venezolanos y extranjeros que hacen poesía”.
¿Cómo está la situación del arte en Puerto Ordaz?
“El artista trabaja muy aislado. La misma falta de organización concibe una marginalidad de parte del Estado. No hay tampoco empresas que promuevan su trabajo y aun está en proceso el inicio de la formación de nuevos valores. Por esto la ciudad está desasistida para una promoción en gran escala del arte guayanés a nvel nacional e internacional; no se ve a Guayana en Nueva York, o a Guayana en Francia”.
En pocas palabras
Unas simples preferencias pueden decir mucho de la personalidad de la gente.
Película: “Horizonte lejano”.
Libro: “Las alas rotas, de Kalil Gibran”.
Ciudad: “La Guaira ”.
Frase: “Lo escencial no es visible a los ojos sino visible al corazón”, del libro El Principito.
¿Qué es lo que Venezuela necesita?: “Conciencia”.
¿Qué es la belleza?: “Algo que se lleva dentro y se reconoce al verlo”.
¿Qué es la felicidad?: “Una utopía por la realización espiritual”.
¿Cuál es el mejor consejo que ha recibido?: “Conócete a tí mismo y conocerás el universo”.
GABRIELA GUEDEZ.
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